El 30 de septiembre de 2015, 196 países, entre ellos España, adoptaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible fruto de las intensas negociaciones entre gobiernos, la sociedad civil organizada y el sector privado. La Agenda recoge 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y 169 metas que marcan la ruta para poner fin a la pobreza, reducir las desigualdades y luchar contra el cambio climático, en los menos de 15 años.
Para lograr estos objetivos es imprescindible la implicación de los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil organizada y de toda la ciudadanía del mundo. Pero, ¿qué papel tiene la sociedad civil organizada en la implementación de la Agenda 2030? ¿Qué responsabilidad tenemos, como organizaciones, ante los desafíos globales que plantea la agenda internacional?
¿Cómo podemos actuar?
Escuchando a las personas y dando voz a los colectivos más vulnerables para asegurar que “nadie quede atrás”.
Denunciando situaciones de exclusión y vulneración de los derechos humanos y sensibilizando a la ciudadanía y a las organizaciones de base para asegurar que el proceso sea inclusivo.
Controlando el cumplimiento, por parte de los poderes públicos, de las obligaciones internacionales adquiridas. Las organizaciones de la sociedad civil deben exigir a sus gobiernos la responsabilidad y la obligación de aplicar los ODS. Es imprescindible llevar el diálogo a la base, a lo local, reconociendo a las instituciones más cercanas (ayuntamientos y parlamentos autonómicos) como interlocutoras fundamentales para el desarrollo.
Monitoreando el proceso a través de la compilación de datos y la elaboración de informes y evaluaciones. Haciendo un seguimiento de políticas públicas dirigidas a luchar contra la pobreza, las desigualdades y la discriminación en la línea de los ODS (AF).
Fortaleciendo la articulación y las alianzas entre las organizaciones de la sociedad civil y grupos de interés. Es imprescindible un diálogo inclusivo, holístico y multisectorial, y que además permita impulsar proyectos conjuntos en defensa de los derechos humanos y aunar esfuerzos para lograr objetivos comunes.
La heterogeneidad y la diversidad de acción y especialización (en salud, educación, medioambiente, etc.), el conocimiento y la experiencia en el terreno, la capacidad de actuar como altavoces de los colectivos más vulnerables y excluidos o la solvencia en articular discursos y elaborar argumentos de calidad, nos sitúa como actores estratégicos para el logro de los ODS.
Por este motivo, la Fundación Vicente Ferrer (FVF), a partir de octubre 2017 llevará a cabo, con el apoyo del Ayuntamiento de Madrid y mediante la aplicación de una guía didáctica (elaborada por ISI Argonauta para la FVF), talleres dirigidos a personal técnico y voluntario de organizaciones que quieran apoyar la Agenda de Desarrollo Sostenible, conocer la Agenda 2030, participar en espacios de debate sobre la misma y fortalecer sus capacidades para su implementación.
Las organizaciones de la sociedad civil somos actores estratégicos para el logro de los ODS